El cuarto grabado que colgaba entre otras pinturas de las paredes en casa de Yolanda Amador, sobre un tapiz de los años cincuenta. El más terrible e intimidante. Con ustedes, un ser atormentado por el pensamiento que lo domina, convertido en serpiente ante una pasión que lo absorbe, La Envidia, de Severo Amador.
sábado, 11 de abril de 2009
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Muy interesante página sobre el gran Severo Amador.
ResponderEliminarYo he escrito algo al respecto en http://miguelangelmoralex-bitacora.blogspot.com/
inclusive cito esta página)
Hola!!! Yo soy historiador y he dedicado un buen tiempo al estudio del padre de Severo, Don Elías. De hecho pertenezco a una asociación de historiadores que lleva este nombre. Ustedes me podrían dar alguna pista sobre los papeles que dejó Don Elías??
ResponderEliminarMil gracias!!
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